A lo largo de la historia, el hombre ha establecido sus poblados cerca del agua para poder sobrevivir. Ésta fue un elemento esencial para construir Madinat al-Zahra en el lugar donde se ubica, ya que por allí pasaba el acueducto romano
del emperador Augusto, el Aqua Augusta
.
El agua era necesaria para abastecer palacios, mezquitas, hammanes y jardines. Las técnicas de captación y distribución de agua permitieron llevar agua corriente
a fuentes, albercas, cocinas y letrinas de todo el Alcázar, Este uso del agua, que hoy es habitual en nuestras ciudades, fue un avance muy
importante para una ciudad del siglo X.
El califa Abd al-Rahman III
aprovechó los cimientos del acueducto romano para construir el que conocemos con el nombre de Acueducto de Valdepuentes
para llevar el agua a Madinat al-Zahra.
Construyó una serie de pozos de resalto
que permitían disminuir la presión y controlar el caudal. Una vez que el agua había llegado a la ciudad, la construcción escalonada
de ésta permitía que discurriese por el llamado "callejón del agua"
y se distribuyese a través de tuberías a los diferentes edificios, hasta llegar a las albercas de los jardines en la parte más baja.
Además de este sistema de captación de agua corriente, existía otro de evacuación de aguas residuales procedentes de cocinas, letrinas y lluvia, mediante tuberías de plomo dispuestas bajo los pavimentos.
Tanto en el Museo como en el propio yacimiento arqueológico
, se pueden ver elementos directamente relacionados con el uso del agua en Madinat al-Zahra. Si aún no los conoces, te invitamos a venir para que puedas descubrir la importancia que tuvo el agua en Madinat al-Zahra.